Aunque la DMCA ofrece un camino claro y efectivo para que el usuario recupere el material removido por el sistema de notificación y retiro, este mecanismo también permite que las plataformas retiren contenido legítimo o de manera desproporcionada. Si, por ejemplo, el supuesto titular del contenido quiere silenciar la crítica de un usuario, puede activar la DMCA para censurar esa expresión, al menos durante unos días. La esencia de este instrumento es retirar contenido primero y hacer las preguntas después.
Por ejemplo, en junio de 2021 el músico y youtuber Alvin denunció que Sony Music hizo que Youtube bloqueara un video de su canal en el que usaba varios clips de pocos segundos de videos para hacer una crítica sobre el cantante Camilo. Profundiza sobre este tema en nuestro recuento de casos.
En cumplimiento de acuerdos de libre comercio, la DMCA se ha replicado en América Latina. La Ley de Propiedad Intelectual de Chile exige la intervención de un juez en el proceso; en 2020, México aprobó una ley que obliga a los intermediarios a establecer un sistema de notificación y retirada sin intervención judicial, y en Colombia, algunos esfuerzos previos de regulación –conocido como “Ley Lleras”– han fracasado en el Congreso. En el fondo del debate siempre ha estado presente la pregunta por la protección de la libertad de expresión a la luz de los estándares interamericanos.